Clínica y manejo del desprendimiento prematuro de placenta normoinserta

Objetivos
Describir la sintomatología, manejo y morbilidad materno-fetal del desprendimiento prematuro de placenta normoinserta (DPPNI).
Metodología
Se presenta un caso clínico de una secundigesta de 29 semanas que acude a urgencias por dolor abdominal tipo cólico, afebril y tensiones límites (145/95). Proteínas positivas en sedimento de orina. TA superior a 140/90 de una semana de evolución. Ecografía: feto en cefálica, LA normal, placenta normalmente inserta. Analítica: 128.000plaquetas, creatinina normal, 100mg de proteinuria. NST: irritabilidad uterina, reactividad fetal. Se inicia tratamiento antihipertensivo, analgesia e hidratación.
Resultados
A las 2 horas se visualiza metrorragia súbita y salida abundante de coágulos procedente de cavidad. Latido y movimientos fetales presentes, placenta en cara anterior aumentada de tamaño con signos de inicio de DPPNI. Posteriormente experimenta un cuadro de dolor agudo en hipogastrio y aumento de metrorragia. NST con ritmo silente decelerativo por lo que se indica cesárea tras administración de sulfato de magnesio. Nace feto ph: 7,04, Apgar 0-2. Tras 30 minutos de RCP se consigue estabilización y se gestiona traslado a hospital de referencia donde diagnostican hemorragia cerebral con evolución a muerte neonatal. La puérpera ingresa en UCI con hemoglobina posparto de 7mg/dl, se realiza transfusión de hemoconcentrados y control de TA y diuresis.
Conclusiones
El DPPNI está implicado en el 10% de los partos prematuros. La morbilidad fetal incluye hipoxemia, asfixia, bajo peso y/o parto prematuro. La tasa de mortalidad postneonatal está relacionada con la prematuridad. Entre los hallazgos clínicos del DPPNI destacan algunos inespecíficos como dolor abdominal/espalda que puede confundir en el diagnóstico, sangrado vaginal acompañado de contracción/sensibilidad uterina y/o patrón de Frecuencia cardíaca fetal intranquilizador. La Hipertensión materna incrementa cinco veces el riesgo de desarrollo de DPPNI por alteración de las arterias espirales. En casos de desprendimiento grave ha de considerarse el parto por cesárea debido a la inestabilidad fetal y hemodinámica ya que la hemorragia masiva y la liberación de tromboplastina produce alteraciones en los mecanismos de coagulación que puede derivar en un cuadro de coagulación intravascular diseminada (CID).
Bibliografía
Oyelese, Y., Ananth, CV. (2018). Placental abruption: Management 2018 Ananth, CV., Kinzler, WL. (2018). Placental abruption: Pathophysiology, clinical features, diagnosis, and consequences

Autores de la comunicación

Eva Martínez Rodríguez
FEA. Obstetricia y Ginecología. Hospital Punta Europa. Algeciras. Cádiz.

María Romero Nevado
Matrona. Hospital Universitario Reina Sofía. Córdoba.

Elena López De La Torre
Matrona. Hospital Doctor Jose Molina Orosa. Lanzarote.

Póster