Evaluación de la inducción del parto en pacientes con cesárea anterior

Objetivos
INTRODUCCIÓN: La inducción del parto para las indicaciones maternas o fetales sigue siendo una opción para mujeres que se someten a prueba de parto vaginal después de cesárea (PPVDC). Sin embargo, el aumento potencial del riesgo de rotura uterina (RU) asociado con cualquier inducción, y la disminución del éxito del parto vaginal debe ser discutido entre el médico y la paciente que debe de estar adecuadamente informada. La evidencia de los resultados sobre los beneficios y daños entre la Cesárea Electiva Programada (CEP) y la Inducción del parto en CA se ha obtenido de estudios no aleatorios y asociados con posibilidad de sesgo. Por lo tanto, los resultados y las conclusiones de estos estudios se deben interpretar con precaución.
Material y métodos
Análisis descriptivo de la finalización de la gestación mediante inducción del parto en pacientes con cesárea anterior durante un periodo de estudio de 10 años (2007-2017).
Resultados
Del total de pacientes con cesárea anterior (CA) durante el periodo estudiado (n:3573), se indicó inducción del parto a un 13% (n:470). La media de semanas fue 39. El principal motivo de inducción en estas paciente fue la gestación en vías de prolongación (29,5%, n:139), seguido de la rotura prematura de membranas de más de 12 horas de evolución ( 25,7%,n:121) y la enfermedad hipertensiva del embarazo (4,46%,n:21). El método más utilizado de inducción fue el uso de oxitocina (53%,n:249), seguido de la inducción mixta (uso de prostaglandina Dinoprostrona o misoprostol asociada a oxitocina; balón de COOK asociado a dinoprostona u oxitocina: 24,2%,n:114). El tercer lugar lo ocupa el uso de maduración cervical con dinoprostona exclusivamente (17%,n: 80) y por último el uso de misoprostrol (5.3%,n:25). El 56,8% de la pacientes recibieron anestesia regional epidural, un 21,9% intradural, un 39,4% local infiltración y el 12,2% no recibieron ningún tipo de analgesia. La finalización de la gestación en estas pacientes inducidas fue de un 38,2% (n:182) mediante cesárea intraparto, un 34,2% (n:161) de forma eutócica y un 18,7% (n:88) mediante parto instrumental. El motivo más frecuente de cesárea en estas pacientes fue la no progresión del parto (34,6%,n:63), seguida del fracaso de inducción (29%,n:53) y el riesgo de pérdida de bienestar fetal (24%,n:44). El instrumento más utilizado fue la ventosa obstétrica (82,9%) seguido del fórceps (7,1%). Como complicación destacar la presencia de dos casos de dehiscencia de cicatriz parcial detectados durante la realización de la cesárea, y un estallido vesical igualmente durante la realización de la cesárea. En el caso de parto vaginal las complicaciones más frecuentes fueron los desgarros vaginales, hemorragia postparto y la distocia de hombros. El peso medio de los recién nacidos en estas pacientes fue de 3293 gramos. Ningún recién nacido precisó ingreso en UCI neonatal.
Conclusiones y comentarios
Varios estudios han observado un aumento del riesgo de ruptura uterina (RU) después de la inducción del parto en mujeres que intenten PPVDC (2-3 veces mayor ). Aunque se puede inducir el parto por indicaciones maternas o fetales en mujeres que intenten PPVDC los médicos deben informar a la paciente que aumenta el riesgo de RU y disminuye la posibilidad de PVDC exitoso. Los estudios sobre los efectos de las prostaglandinas en la RU en la PPVDC han tenido resultados inconsistentes y son limitados, pero por lo general indican que el riesgo de RU puede variar entre los agentes empleados. Más específicamente, el riesgo de RU en las mujeres que tenían inducción fue más bajo con oxitocina (1,1%), seguido de PGE 2 (Dinoprostona) (2%), y la más alta con misoprostol (6%). En particular, el método de inducción probablemente se asocie con el estado del cuello uterino, así como la duración de la inducción, lo cual puede confundir la fuerza de las asociaciones reportadas en muchos estudios. Según nuestro estudio podemos concluir que: - El tipo de finalización de la gestación en pacientes inducidas con CA es la cesárea. - El método más eficaz y seguro es la inducción con oxitocina, con un riesgo de complicaciones de rotura uterina que no alcanza el 0,4%.
Bibliografía (máximo 20 citas)
Protocolos SEGO

Autores de la comunicación

María Escribano Cobalea
Médico Residente de Obstetricia y Ginecología. Hospital Juan Ramón Jiménez. Huelva.

María Gertrudis Gómez Molina
Médico Residente 4º año. Ginecología y Obstetricia. Hospital Juan Ramón Jiménez. Huelva.

Manuela Lucena Campos
FEA. Obstetricia y Ginecología. Hospital Juan Ramón Jiménez. Huelva.

Antonio Ruano García
Jefe de Servicio. Obstetricia y Ginecología. Hospital Juan Ramón Jiménez. Huelva.

Póster